sábado, 10 de octubre de 2009
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
Nos avisaron,
pero éramos tan ciegos.
Y ahora ya está aquí,
como quien dice, con su bota en nuestras
cabezas, y nosotros,
como quien dice, en bragas,
en medio del otoño,
en medio de un mes huérfano y estéril.
Y que, además,
nunca parece nuevo,
sino lo último de algo envejecido.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Octubre, mes sin dioses
ResponderEliminar(J. A. González Iglesias)