una ancha sombra
tras los cristales.
y nada más.
están cerradas todas las salidas
y todas las entradas, pero
no tienes un buen dios que apriete ni que asfixie.
puedes saltar por la ventana,
rezar por el metálico esqueleto
de las sombrillas.
inténtalo.
no queda nada y yo tan solo puedo
querer morderte una vez más.
no hay quien resuma tu existencia,
dormido en la autopista, disfrazado
de buen turista.
más tus fotografías te delatan: tienes
un corazón horrible,
un monstruo atroz.
salta por la ventana.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
martes, 1 de septiembre de 2009
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